Amor, amor, amor... Aparentemente una simple palabra, pero aunque sea tan pequeña es inmensa, una de las más grandes de todas. Formada tan solo por cuatro letras, significativas ante los ojos.
La "a" representa el abismo de sentimientos, ilusiones y suspiros que nacen en ti hacia una persona especial en tu vida. La "m" representa el infinito, la profundidad del mismo, así como el inmenso mar. La "o" representa que estos sentimientos tienen que ser mutuos, sentimientos que solo se dan entre los dos. La "r" contempla la riqueza del alma, la realidad del corazón.
Cuando se ama verdaderamente, tu corazón late cada vez más fuerte. Te llenas de emoción, de ilusión y de alegría cuando simplemente vez a la otra persona que amas. Sientes que tu cuerpo vibra; te sientes completo, que nada te falta; Te llenas con una sola mirada, con una sola sonrisa, con una sola caricia, con un solo beso... Te sientes la persona más feliz del planeta...
Sientes que la vida no es vida si esa persona no está; esa persona está en lo más profundo de tu corazón, la llevas incluso impregnada en todo tu ser; se convierte en tu musa, en tu constante inspiración; en tus ganas de superarte, de ser cada día mejor...
Cuando amas te das cuenta de todo lo grande y maravillosa que una simple e insignificante palabra escrita y descrita para algunos es tan incomparablemente hermosa y llena de sentimientos y emociones para otros.
